Hola amigos, hoy toca turno a un personaje muy original, que tenía un poco de poeta y loco, es parte del “selecto” grupo de los 27 y es un referente en la música de finales de los 60’s, hablamos del mítico “Rey Lagarto”, Jim Morrison.
Nace en Melbourne, Florida, Estados Unidos, un 8 de diciembre de 1943; sus padres fueron George Stephen Morrison y Clara Virginia Clarke, quienes también tuvieron un par de hijos más.
Debido a que su padre era militar, la familia tuvo que moverse por muchas ciudades, por lo que este trajín marco fuertemente la forma de ser de Morrison. A temprana edad le gustaba la poesía de escritores como Nietzsche, Rimbaud, Kerouac, Aldous Huxley entre otros, también le gustaba la pintura y leía mucha literatura.
Cuando estudió en la UCLA de los Ángeles tuvo de compañero de generación a quien se volvería un gran cineasta, Francis Ford Coppola y que unos años después hizo la película “Apocalypse Now” y utilizó la canción “The End” como parte de la banda sonora de la misma.
No hay mucho que decir de esa época escolar, ya que le tocó vivir su adolescencia rodeado de la cultura hippie y donde también descubrió las drogas como el peyote, la marihuana, el LSD; así fue esa época de amor y paz… eso dicen. Ahí conoció a quien decía era su alma gemela, Pamela Courson, también decía que era su amor cósmico.
Con la intención de dar a conocer su poesía, Morrison le presentó sus escritos a quien más delante se convertiría en su compañero de banda, Ray Manzarek con la intención de poder hacerlas canciones. Cuando Manzarek le pidió que cantará algunos versos quedó sorprendido por el talento que mostraba y le propuso que formaran una banda de rock. La alineación quedaría después de varios cambios de elementos con: Ray Manzarek en los teclados, Robby Krieger en la guitarra, John Densmore en la bataca y obvio, nuestro artista del día, Jim Morrison en la voz principal.
El nombre de la banda surge de una cita de William Blake “Si las puertas de la percepción fueran depuradas, todo aparecería ante el hombre tal cual es: infinito” un poco confuso, pero así se las gastan los poetas.
Sus primeros conciertos fueron en varios bares locales de Los Ángeles hasta que les dieron un contrato en “Whisky a Go Go” y noche tras noche tocaban sus canciones donde destacaba una, “The End”, rola con muchas improvisaciones donde Morrison en el escenario cambiaba los versos dependiendo de su estado de ánimo. En una ocasión, tenían una presentación, pero Morrison se había metido cantidades industriales de alcohol, marihuana y LSD que fue llevado cargado por sus compañeros hasta el escenario para presentarse y llegando al tema “The End” comenzó a improvisar, sobre la marcha compuso una original versión de la tragedia de Edipo de Sófocles, donde termina matando a su padre y desposando a su madre.
Fue tanto el impacto que causaron en el público que el dueño del local los corrió, se dice que entre la audiencia se encontraba Paul A. Rothchild, dueño y productor de Elektra Records que los encontró en la puerta trasera y de inmediato les ofreció hacer un disco.
En 1967 la banda publicó su primer disco homónimo y fue con el sencillo “Light My Fire”, escrito completamente por Robbie Krieger, que se mantuvo varias semanas a la cabeza de las listas de popularidad del Billboard.
La actitud provocadora en escena de Morrison, perturbaba el orden público, lo que tuvo como resultado que muchos de sus conciertos fueran prohibidos en varias ciudades de Estados Unidos.
Las sesiones de grabación para el tercer álbum fueron muy tensas como consecuencia de la dependencia al alcohol por parte de Morrison. Llegando al clímax de su popularidad, The Doors tocaron en varios eventos lo que provocaba enfrentamientos entre los fans, sobre todo uno en particular en el Chicago Coliseum. En otra ocasión, el 9 de diciembre de 1967 se presentaron en Connecticut, donde Morrison fue detenido por la policía ya que el mismo estaba intercambiando caricias y apapachos con una chica atrás del escenario cuando los cachó un policía quien no se dio cuenta que era el mismo Morrison y le dijo, “lárgate, este lugar es para The Doors” a lo que Jim respondió: “Yo soy The Doors”. Este incidente lo aprovechó Morrison para platicárselo a la audiencia y manifestar su coraje contra la policía.
No cabe duda que la banda era muy buena, su estilo musical destacaba del resto en aquella época, pero fueron más los incidentes dentro y fuera del escenario por parte de Morrison que la cantidad de material discográfico a destacar.
Cansado de sí mismo y de su imagen, Morrison le entró duro a la comida, se dejó crecer la barba y decidió irse a Paris, a buscar nuevos aires y hacer un reinicio de sus prioridades, así que en marzo de 1971 se fue con su compañera cósmica Pamela. En menos de cuatro meses, una madrugada del 3 de julio, Jim Morrison dejaría este mundo, se le encontró muerto en la bañera y como dato curioso, no se le hizo la autopsia por lo que se desconoce las causas reales de su fallecimiento.
Hasta aquí le dejamos con un poco de la historia del vocalista y líder de The Doors.
¡Hasta pronto!
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